Después de estas dos semanas desde que acabamos las clases,  sigo teniendo muy presente todos los momentos que he compartido con vosotros  y al igual que el último día en la despedida ya se me saltaron las lágrimas,  ahora escribiendo esto también.  La verdad que cada día que pasa, al abrir los ojos y encontrarme con la super tarjeta que me hicisteis  pienso en cuanto me gustaría volver a estar con vosotros en clase.  No me imaginaba que mis primeras prácticas fueran a ir también y eso es de agradecer.  Pero si a alguien tengo que agradecer es a esa persona que se ha molestado en escribir esta entrada,  aquella que desde el primer día me acogió en su clase y en la que en estos momentos  puedo considerar una amiga de verdad, Natalia.  Espero de todo corazón que vuestros hijos hayan disfrutado con mi presencia en clase  y que aún no me hayan olvidado.  Gracias Natalia por todo de verdad, no tengo ya palabras para expresar mi cariño, solo decirte de verdad que eres  una gran tutora. Soraya, profesora en practicas 2013